275. Una carta llegada desde el exilioDesde Francia llegó a Gijón para hacerle una entrevista y se encontró con que estaba fuera, en el exilio portugués. Tanto era su interés que encontró la manera de hacerle llegar una carta. La respuesta no tardó en
llegar...
274. Lo que dice la grafología
Hace ya unas cuantas semanas recibí un mensaje en el correo que me llamó poderosamente la atención. Me preguntaban dónde podían encontrar documentos con la firma
de nuestra protagonista. Su interés no tenía nada que ver con el
coleccionismo...
273. En la Casa de Rosario de Acuña
El pasado día 30 de julio se clausuró la exposición «Rosario de Acuña (1850-1923). Una aproximación desde el archivo de José Bolado», tres meses después de que fuera
inaugurada, tres meses después de que se cumpliera el centenario de su muerte, ocurrida el cinco de mayo de 1923 en la casa que se hizo construir sobre los
acantilados...
272. Lidia Falcón en la Escuela
La escuela a la cual hace mención el título de este comentario es la Escuela Feminista Rosario de Acuña, que este año presenta algunas notas singulares en su
programa, por aquello de la coincidencia de dos números redondos: cumple su
edición...
270. ROSARIO Reflejo de Acuña
Sobre el escenario fueron tomando forma y vida las variadas facetas de una Acuña plural, que no fue encarnada por una sola actriz, sino por todas ellas, las cuales en un momento u otro se
convirtieron...
269. Un faro en El Cervigón
Es fácil suponer cuál fue mi respuesta... Se pública en la página cinco y se reproduce aquí para quienes no puedan conseguir un ejemplar del número 41 de Horizontes
lejanos...
268. Sobresaliente
Es fácil suponer cuál fue mi respuesta... Se pública en la página cinco y se reproduce aquí para quienes no puedan conseguir un ejemplar del número 41 de Horizontes
lejanos...
266. La marea y el Primero de Mayo
Para que nadie se llamara a engaño, lo dejó muy claro en un escrito publicado en Heraldo de París: «Oye tú, obrero; no soy de tu clase; vengo de muy alto...».
Por aquel entonces residía en la localidad cántabra de Cueto y era una avicultora dedicada por entero a sus patos y gallinas. Aunque vivía de su
trabajo...
264. Unidas en el homenaje
Las ciudades de Pinto y Gijón se unieron para homenajear a esta mujer ejemplar que en Pinto renació y en Gijón pasó los últimos años de su vida. Lo hicieron en
el mes de mayo de 2023, al cumplirse el centenario de su
muerte...
259. Otra vuelta por el paseo
Cercano el centenario de la muerte de doña Rosario, vuelvo una vez más al paseo confiando en que, al fin, sepamos por dónde andamos. Si en el Directorio
de la web del Ayuntamiento de Gijón introduces "casa de Rosario de Acuña"
aparece...
258. En un vagón de tercera
Tomó partido por quienes defienden en los campos de batalla los valores de progreso y libertad frente al militarismo expansionista, y toma el tren correo que
desde Gijón la conduce a Madrid para participar en el mitin aliadófilo...
257. Una gijonesa ejemplar
No nació en Gijón, pero aquí quiso pasar los últimos años de su vida, aquí quiso morir y en el cementerio civil reposan sus restos, mirando al sol nacer. No es,
ciertamente, gijonesa por nacimiento, sino por propia voluntad, porque así lo quiso. La suya fue una decisión largamente
acariciada...
256. Vida y pensamiento feminista de Rosario de Acuña
El Fórum de Política Feminista de Asturias, que tiene como uno de sus objetivos el de contribuir a la recuperación y construcción de la memoria de las mujeres,
ha querido recordar a Rosario de Acuña en este año en el que se cumple el centenario de su muerte. De las
actvidades...
255. Virginia González: lo que faltaba
De algunos de ellos conocemos el texto completo del que forma parte; de otros, nada más. Es el caso del escrito firmado por Virginia González, del cual
tan solo se podía deducir el periodo en el que había sido escrito y el
suceso...
254. A las puertas del centenario
A unos días del inicio de 2023, el año del centenario de la muerte de Rosario de Acuña, ya sabemos que tanto en Pinto como en Gijón tienen previsto un amplio
programa de actividades para mantener viva la memoria de quien fue una de sus vecinas
ejemplares...
251. Tini Areces y Rosario de Acuña, de paseo en paseo
Quizás fuera en este contexto, el de la recuperación de la fachada marítima y la protección del litoral gijonés, donde Tini Areces se encontró con
Rosario de Acuña. Al pie del proyectado sendero se hallaba la última vivienda de esta ilustre gijonesa, cuya memoria se estaba recuperando por
entonces...
250. ESTACIÓN DE GIJÓN - ROSARIO DE ACUÑA
Tras el anuncio del Gobierno de su proyecto para poner nombre de mujer a varias estaciones de la red ferroviaria, en Gijón se ha abierto una campaña para
conseguir que la estación de ferrocarril gijonesa pase a denominarse Estación de Gijón – Rosario de Acuña. Razones no
faltan...
245. Dos mujeres y un santuario
Con una diferencia de unas semanas las dos van a visitar el coruñés santuario de Pastoriza; y ambas dejaron escritas sus impresiones (bien diferentes,
por cierto) de la
visita...
240. Un alto en el camino
Como bien saben quienes suelen disfrutar de la montaña, no se trata de caminar por caminar. De vez en cuando conviene hacer una parada. Tras doscientos treinta
y nueve comentarios, bien podemos hacer un alto en el camino y así poder
visualizar...
238. Madrina de guerra
Si bien es cierto que España se mantuvo neutral durante la Primera Guerra Mundial, también lo es que una parte de su población tomó partido por alguna de las
dos alianzas contendientes, alentada por la
disputa...
237. Un director de escena en el testamento
Era hijo de Luis París y Arriola, maestro sastre del Teatro Real e integrante del círculo de amistades de Felipe de Acuña y Dolores Villanueva, a quienes solía
visitar con cierta frecuencia. Rosario lo conocía desde niño, de haberlo visto una y otra vez en la casa familiar acompañando a su padre; lo había visto crecer; y,
cuando Luis
alcanzó...
235. El retorno del cesante jubilado
Por más que aún haya quien le siga otorgando el título de condesa, el caso es que su padre ingresa con diecinueve años de edad en el Ministerio de Comercio,
Instrucción y Obras Públicas como escribiente de la clase de terceros, con un sueldo anual de cinco mil reales. El joven Felipe de Acuña Solís había abandonado su Jaén
natal...
234. «Una madrileña insigne», por Pedro de Répide
«...comprendemos su apartamiento voluntario de la sociedad en que debió brillar, y la vemos en su retiro de Pinto, cerca de la torre que sirviera de prisión
a la princesa de Éboli, o atisbamos de nuevo su figura en las soledades de la costa de Cantabria y de Asturias,
llena...
233. Marruecos, la tumba de miles de españoles
Dolor y muerte. Miles de heridos, miles de muertos. Llevaba tiempo sufriendo por todos ellos, ahora también por los suyos. «¡Justicia para los que hicieron,
sean los que sean, de los montes de Marruecos el cementerio más espantoso, la sima más horrenda que podrán
contemplar...
232. El señorito chulo
Tiene treinta años y su vida es un modelo. Su padre, el cacique de la ciudad, es de Andújar y su madre, hija de un fabricante de licores, malagueña.
El padre además de cacique es abogado, jefe de su partido político en la región y
propietario...
231. Las hermanas de Rosario de Acuña
Compañeras eran para ella las mujeres. Así, desde el plural, desde el «nosotras», entendía ella la emancipación de la mujer, lo cual representa una sensible
diferencia con otros planteamientos, quizás más individualistas, que al respecto mantenían
algunas de sus
contemporáneas...
230. Algunas dudas acerca de la autoría
Había en los textos referencias a la columna en la que se insertaban que no parecían salidos de su pluma, eran más propias de la responsable del periódico
o de una colaboradora cuyos escritos la ocuparan habitualmente («hemos de dejar de consignar en nuestra sección», «va a honrar hoy esta sección»).
Tampoco me acaba de convencer lo de la
firma...
229. Estadísticas y algo más
Gracias a las omnipresentes
cookies, Google Analytics, la herramienta de análisis de audiencia asociada a esta plataforma, facilita información acerca
de los contenidos visitados, la duración de las visitas o la procedencia de las mismas. Es así como pude saber
que...
228. Su gran valedor
Es preciso recordar que la autora tiene veinticinco años, y que esas dos notas distintivas –ser mujer y ser joven–, que tanto sorprendieron a los críticos
por entonces, no dejan de resultar sorprendentes también en la actualidad, no tanto
por...
227. La primera en la Exposición
En 1932 la gaditana Amalia Carvia Bernal pronunciaba unas palabras de reconocimiento al papel que Rosario de Acuña había desempeñado en el despertar de muchas
conciencias femeninas. Aunque no era la primera vez que lo hacía, quizás sea en esta ocasión cuando
mayor...
226. La tía olvidada
La suya era una de las biografías que había sido enviada a la profunda fosa de la desmemoria. Me preguntaba si no habría algún familiar que, conservando vivo
su recuerdo, se atreviera a aportar alguna luz en aquella negritud del
olvido...
225. Homenaje a Giordano Bruno
De vez en cuando, alguna de las líneas de investigación que permanecen en vía muerta se reactiva. Hace unas semanas localicé un escrito inédito de nuestra
protagonista: se trata de un texto manuscrito que lleva por título «Lo indescifrable», uno de los
documentos...
224. Entretenimiento para la esposa
Mientras ella se ganaba la vida con los productos de su granja avícola, había ilustres compatriotas que instalaban un gallinero para entretenimiento de la esposa,
para que lo pasara menos aburrido, distrayéndose en llevar a sus pollitos el migón de
pan...
223. No, no era Carmen de Burgos (Colombine)
Pues resulta que, en contra de lo que se había escrito, no son la misma mujer; que esta Carmen Burgos del ochenta y ocho no es la Carmen de Burgos del homenaje
a Echegaray: son dos persona distintas, tal y como ha podido constatar Manuel Almisas Albéndiz en un
artículo...
222. Arrivederci Roma
La estancia no sería completa sin visitar el Vaticano. Por suerte para Rosario, su tío gozaba por entonces de una situación privilegiada. Para que nada faltara, fue
recibida en audiencia privada por el papa
Pío IX...
221. La Academia de papel
En 1917 el diario madrileño
El Imparcial dedica un lugar destacado de su portada a la Academia, poniendo en duda que sus integrantes sean los
más idóneos. Para probarlo, nada mejor que realizar un
referéndum...
220. Salmerón padre, Salmerón hijo
Es probable que en una de sus estancias en la casa de El Cervigón le contara a su invitado, el hijo del protagonista de esta historia, lo que sucedió en
1891 cuando visitó la casa familiar de los Salmerón: entregó su tarjeta, pasaron a una sala;
esperaron; y al cabo de un rato salió un
señor...
219. Una feliz iniciativa con incierto final
El 5 de octubre de 1882 fallece en Madrid Pablo León y Luque, médico forense del distrito del Congreso, antiguo presidente de los forenses madrileños. Unas semanas
después se conoce la feliz iniciativa que había tenido Rosario de Acuña para honrar la memoria del difunto
galeno...
218. A propósito de Dreyfus
Aunque no sería esta la primera vez que un escrito suyo termina en una carpeta o en un cajón, cabe pensar
–y parece lo más probable– que cuando escribió aquellas
líneas dirigidas al «señor don Emilio Zola» ya sabía que el destino de esta
carta...
217. Acuerdo de separación
Se separan de mutuo acuerdo. Él se va del domicilio familiar, le pasa una pensión; ella asume la obligación de visitar a su marido y
así lo hace en, al
menos...
216. Emilia Villacampa, la hija del héroe
Muchos fueron los círculos, centros, casinos o ateneos que organizaron actos para enaltecer la memoria del brigadier Villacampa. Uno de ellos, el que tuvo
por escenario el casino de Unión Republicana en Gijón, contó con la participación de
Rosario de Acuña...
215. Amazona
Años ochenta del siglo diecinueve; una desconocida mujer se aproxima a las primeras casas de una apartada aldea gallega. Los aldeanos «se paran atónitos
sin explicarse cómo me sostengo sobre mi silla
inglesa...
214. Su última confesión
«Rosario de Acuña, teósofa», es el título que Mario Roso de Luna le pone al escrito que publica en
Hesperia y en el cual se hace eco de la carta que
ha recibido de Carlos Lamo. Su contenido bien pudiera considerarse la última
confesión...
213. Preparando el centenario
Hace unos meses, una concejala del Ayuntamiento de Gijón se interesaba por conocer cuáles eran mis propuestas al respecto. Por diversas circunstancias no
se las pude hacer llegar entonces. Quizás ahora sea buen
momento...
212. La prima repudiada
Se enteraron, claro que se enteraron. Cuesta trabajo creer que no lo hicieran, pues los periódicos de toda España, aun los de menor tirada, se hicieron
eco de aquel escándalo. La prima Rosario, la hija del difunto tío Felipe, estaba en boca de
todos...
211. El médico que la vio nacer
Enterada de su muerte, quiso rendirle un público homenaje. Se trata de Pablo León y Luque, afamado galeno que repartió sus esfuerzos entre los juzgados
y las casas de socorro de Madrid, entre la beneficencia y la medicina
forense...
209. La conexión alicantina
Entonces como ahora, lo importante es que el mensaje llegue a cuantas más personas mejor. El buen paño, la mejor idea, la eficaz consigna, deben salir de la
preciada arca para que sean bien conocidas. Lo sabía, tenía que saberlo, cuando
decidió...
208. El paseo que (casi) nadie conoce
A pesar de figurar en el callejero oficial desde el año 1990, no he encontrado hasta el momento referencia alguna que informe a quienes por él transitan dónde
empieza y dónde acaba el denominado Paseo Rosario de
Acuña...
207. Separada hasta la muerte
Rosario y Rafael acordaron su separación. «Sola estaba, sola estoy». Treinta y dos años tenía entonces. Toda una vida por delante, que en ningún caso podía estar supeditada a la tutela
de quien legalmente continuaba
siendo...
206. «La caverna y el Patronato Rosario de Acuña», por Regina Lamo
Es el nombre de Rosario de Acuña, la anticlerical, la librepensadora, lo que estorba. Hay que acabar con lo que significa, como acabaron con ella en vida. Es la
consigna...
205. La conferencia y los mestizos
Una lección aprendida: que en asuntos de tribunales conviene ser bien prudente, pues para que tan renombrada Dama se ponga el turbante en los ojos y se avenga
a resolver los litigios «necesita como primera condición para actuar la tasa de
precio»...
203. Ninguno de los dos
... y encargo a don Luis París y Zejín que ayude a ordenar, coleccionar, corregir y publicar (poniéndole prólogo a la colección) a don Carlos Lamo y Giménez
todas mis obras
literarias...
202. Mujeres míticas
Estaban ahí. ¡Claro que estaban ahí! Solo era preciso buscarlas en el sitio adecuado y, una vez encontradas, darles la visibilidad adecuada. Eso es lo que ha venido
haciendo en los últimos años el Ayuntamiento de
Gijón...
201. Alerta en la villa de Pinto
La situación debió de volverse un tanto incómoda para aquella mujer que recibe tantas visitas de forasteros, que tantos viajes realiza,
que celebra animadas veladas en su
vivienda...
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